29 de abril de 2014

DE MI CUERPO HACIA EL TUYO

El callado oleaje que con la noche crece
de mi cuerpo hacia el tuyo
da noticias del mundo como la mar abierta.

Hay desiertos que dudan y pasan confundidos
sobre piel de un camello su tormenta de arena,
silencios de alameda donde el invierno expira
igual que un toro herido.

Jamás se le ahogó al agua
la palabra en su cauce,
ni es un simple callar el peso de los astros.

Como una habitación es el silencio
donde poder sentarse y otro modo
de decir donde existe
la templanza. Palabra que permutó en árbol
y se bebió su sombra, y dejó conversando
las viejas en la puerta.

En mis silencios amplios
quedé contigo mudo para sembrar raíces.


26 de abril de 2014

UBICASTE EN MIS OJOS TU MIRADA

Ubicaste en mis ojos tu mirada
y fijaron tus párpados mis límites.

Jamás pude salir a las afueras,
aislado en tus pupilas
convertidas en barrio donde vivo.

En ellas diseñé
la estación de autobuses que cargó
con nuevos equipajes mi palabra.

Se deslizó tu piel sobre mis labios
sellando con su tacto
los rojos del semáforo.

Con tus ojos descalzos me llevaste
hasta la plaza. Guardan
los cipreses el tiempo y mis palabras.

Mis lágrimas recogen silenciosas
el murmullo alojado de tus aguas.


22 de abril de 2014

ABRIL

Como polvo muy fino

abril ha ocupado los rincones
de mi casa. Los vientos no lo agitan.

Hace años que habito estos parajes
y no entiendo por qué
el peñón huele a nada y a tristeza.
Es verdad que la lluvia
hace llorar las ramas de los árboles,
que las hojas se mueren sin un grito
y lo gris es la queja que queda de la luz
en los cristales húmedos.

Viaja la primavera en tu voz que me nombra.
Los clásicos alegres con sus notas
higienizan el aire.


18 de abril de 2014

LA LLUVIA A VECES VISTE DE AMARILLO



No sé cómo llegué
a aparcar en este viejo mundo,
viejo, muy viejo mundo,
si fue el destino o cualquier otra cosa.
Lo cierto es que aquí estoy ahora,
llueve y la humedad cala hasta mis huesos.

Se doblegan las copas de los álamos
bajo la nueva danza de los faros
que dan luz al instante.
Amaré los silencios de la luz
y los escalofríos de cada primavera.
Es todo lo que tengo.

Melancolía de este viejo mundo
que ha perdido hace tiempo su lugar de trabajo.
La lluvia a veces viste de amarillo.

15 de abril de 2014

SI VOLVIERA EL FUTURO QUE SE VA



Si volviera el futuro que se va,
te llamaría de nuevo con palabras de amor,
impregnaría el presente con hojas de laurel
y arrancaría al barranco los aromas robados.

Tus ojos y mis ojos serán uno
más allá de la luz que tímida reposa
con música de Falla en las rosas del frío.

Un aire de pasión puntea tus desnudos,
acordes de una orquesta que diseña
con viento, cuerda y percusión
las alucinaciones del tiempo y de la muerte.